miércoles, 1 de septiembre de 2010

Pastor: Felix Antonio Chávez- UNA LECCIÓN IMPORTANTE SOBRE LA ORACIÓN


UNA LECCIÓN IMPORTANTE SOBRE LA ORACIÓN



Primeramente doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo con respecto a
todos vosotros, de que vuestra fe se
divulga por todo el mundo. Porque testigo me es Dios, a quien sirvo en mi espíritu en el evangelio
de su Hijo, de que sin cesar hago
mención de vosotros siempre en mis oraciones, rogando que de alguna manera
tenga al fin, por la voluntad de
Dios, un próspero viaje para ir a
vosotros. Porque deseo veros, para
comunicaros algún don espiritual, a fin
de que seáis confirmados; esto es, para
ser mutuamente confortados por la fe que nos es común a vosotros y a mí- Pero no quiero, hermanos, que ignoréis que muchas veces me he propuesto ir a vosotros (pero hasta ahora he sido estorbado), para tener también entre vosotros algún
fruto, como entre los demás gentiles.
Romanos.1:8-13
Hay al menos ocho cosas sobre
la oración que podemos aprender de estos versículos:
1. La oración debe incluir
acción de gracias (versículo 8)
Pablo daba gracias a Dios por los cristianos que vivían en Roma, y estaba
especialmente agradecido por su FE. Esta gente era FAMOSA POR SU FE. Su fe les
había ganado una reputación mundial (compare 1 Tesalonicenses 1:8 donde
aprendemos que los cristianos tesalonicenses también eran conocidos por su fe).
¿Qué es la FE? En la Biblia hay dos definiciones sencillas de la fe que se
encuentran en Romanos 4:21 y Hechos 27:25. (Compare la Iglesia de Roma del primer siglo, a la
cual Pablo escribió, con la Iglesia de Roma de hoy. La Iglesia de Roma actual
también es famosa – famosa por sus tradiciones, sus sacramentos, sus rituales,
el liderazgo del papa, etc. –
pero no es famosa por su fe en Dios y en Su Palabra). Pablo estaba agradecido de que en la capital pagana
del Imperio Romano hubiese personas que adoraban y creían en el verdadero Dios
vivo.
2. La oración tiene que ser
“mediante Jesucristo (versículo 8)
No podemos acercarnos a Dios por otro camino (Juan 14;6). ÉL es nuestro
gran MEDIADOR (1 Timoteo 2:5)
Porque hay un solo
Dios, y un solo mediador entre Dios y
los hombres, Jesucristo hombre. Aparte de ÉL, la oración sería
imposible. Por eso oramos “en el Nombre de Jesús”. La palabra mediador
quiere decir: intermediario, reconciliador. Cuando el Señor intermedia por
nosotros se pone a favor de Dios y de nosotros, el es el negociador que los
creyentes tenemos. No hay otro.
3. La oración debería ser
constante (versículo 9)
Pablo oraba por los romanos “sin cesar” (versículo 9 y comparar con 1
Tesalonicenses 5:17). Esta misma expresión se usa para describir la TOS
PERSISTENTE (toser sin cesar). Tal como la tos persistente permanece con una
persona durante el día, así la preocupación de Pablo por los creyentes romanos
lo acompañaba de continuo.
4. La oración debe ser genuina
(versículo 9)
Dios era el testigo de Pablo. Dios sabía cómo era realmente la vida de
oración de Pablo. Otras personas no pueden ser testigos de tu vida de oración;
sólo Dios puede serlo. Pablo no solo pretendía ser un hombre de oración. Pablo
sabía que su vida de oración era genuina y él sabía que Dios sabía.
5. La oración debe incluir la
intercesión (versículo 9)
Pablo mencionaba personalmente a estos creyentes romanos. Pablo alcanzaba
a muchas almas con su predicación y alcanzaba también muchas más almas con sus
oraciones. ¿A quién mencionaba Pablo en sus oraciones? En Romanos capítulo 16
encontramos 26 nombres. (¿Usaría Pablo alguna especie de lista de oración?)
¿Por quienes oras tú? Pablo
obedecía fielmente el mandamiento de Efesios 6:18.
6. La oración debe ser
específica (versículo 10)
Pablo hizo en su oración una petición específica. El oró por un “próspero
viaje”. No hay detalle en tu vida que sea tan trivial que no lo puedas hacer
materia de oración. Si Dios está preocupado de alimentar a las aves y de vestir
a los lirios, él ciertamente estará preocupado por el viaje de Pablo a Roma. ¿Vive el hombre desprovisto de
paz, gozo y santo amor? Esto es porque no llevamos todo a Dios en oración.
7. La oración debe ser sumisa
(versículo 10)
Note la frase clave:”por la voluntad de Dios”. Compare con la oración de Jesús en Lucas
22:42. Pablo no exigía a Dios u ordenaba a Dios o imponía a Dios lo que él
quería. El simplemente hacía una petición y deseaba que su petición fuese
otorgada solamente si era la voluntad de Dios.
8. La oración debe tener un
motivo correcto (versículos 11-12)
¿Tenía Pablo buenas razones para pedir un “próspero viaje” a Roma? ¿Por
qué deseaba Pablo ir a Roma? 1) El quería hacer la voluntad de Dios (versículo
10); 2) El quería confirmar (fortalecer) a los creyentes romanos en la Roca,
Cristo Jesús (versículo 11); 3) El quería confortar y animar a estos creyentes
(como también ser confortado y animado por ellos)— (versículo 12). Las razones
de Pablo eran buenas razones. El estaba preocupado por la gloria de Dios y por el bien de otros.
¿CÓMO CONTESTÓ DIOS LA ORACIÓN
DE PABLO?
Pablo deseaba mucho ir a Roma (ver versículo 11—“porque deseo (un fuerte
anhelo) veros” – compare 1 Pedro 2:2, donde se usa la misma palabra para
describir el hambre del nuevo creyente por la Palabra de Dios). Ver también
Romanos 15:23-24. Roma había sido incluida muchas veces dentro del itinerario
de viaje de Pablo, pero una y otra vez, Pablo se vio impedido de hacer este
viaje (Romanos 1:13 y Romanos 15:22). Una razón por la cual Pablo quería ir a
Roma se encuentra en Romanos 1:13. Otra razón es sugerida en Hechos 9:15. Pablo
sabía que Dios le había dado un ministerio especial “a los reyes” y no había
mejor lugar que Roma para encontrar a un rey. EL REY (César, el emperador
romano) vivía allí.
¿Contestó Dios la oración de Pablo? ¿Llegó Pablo finalmente a Roma? Sí,
pero de una manera muy inusual. Dios no contesta siempre nuestras oraciones
como nosotros pensamos. El próspero
viaje de Pablo
(ver Romanos 1:10) resultó ser uno de los más ingratos y peligrosos viajes a
través del Mar Mediterráneo que puedas imaginarte (descrito con detalle en
Hechos capítulo 27). El viaje no fue ciertamente como Pablo lo había esperado.
Pablo también llegó a Roma bajo circunstancias muy inusuales. EL FUE LLEVADO
ALLÁ COMO PRISIONERO. La oración de Pablo fue contestada, pero de una forma muy
inusual. Como dice el autor del himno:
Dios obra por senderos misteriosos
Las maravillas que el mortal contempla,
Sus plantas se deslizan por los mares,
Y atraviesa el espacio en la tormenta.
En el abismo de insondables minas,
Con infalible y eternal destreza.
Atesora sus fúlgidos designios,
Su soberana voluntad despliega.

No hay comentarios:

Publicar un comentario